Las cuatro sendas del chamán: La senda del maestro

Continuamos con los apuntes del libro “Las cuatro sendas del chamán” de Angeles Arrien.

LA SENDA DEL MESTRO

Dirección: Oeste
Elemento: Agua
Criatura: Criaturas del agua
Recurso humano: La sabiduría
Tipo de meditación: Sentada
Forma de vida: El momento justo
Cuádruple sendero: Apertura al resultado
Bálsamo curativo: El silencio
Instrumento: Palos, huesos
Estación: El otoño

La vía del maestro nos permite acceder al recurso humano de la sabiduría, y cada cultura tiene sus sistemas educativos tradicionales y no tradicionales. Ya se trate de un sistema escolar establecido o de cualquier otro sistema de aprendizaje, el proceso de enseñar y de aprender es universal.
El principio que guía al maestro es el de ESTAR ABIERTO AL RESULTADO, PERO SIN AFERRARSE A ÉL. El maestro posee SABIDURÍA, enseña a CONFIAR y comprende la necesidad de DESAPEGO.

SABIDURÍA: CLARIDAD, OBJETIVIDAD, DISCERNIMIENTO, DESAPEGO
La vía del maestor consiste en practicar la confianza. La CONFIANZA es el contenedor en el que crecen las CUALIDADES DE LA SABIDURÍA: claridad, objetividad, discernimiento y desapego. La sabiduría está en acción cuando nos abrimos a todas las opciones.
La vía del maestro consiste en utilizar la confianza como un instrumento.

CONFIANZA: SENTIRSE CÓMODO EN LA INCERTIDUMBRE
Las tradiciones chamánicas acceden al recurso humano de la sabiduría aprendiendo a confiar y a sentirse cómodas en estados de ignorancia. En algunas partes de África, se dice que el individuo que está en este estado de no saber “camina por la tierra de las nubes grises”. Cuando no se sabe, se considera alocado emprender acción alguna; mientras que esperar y confiar son actos de sabiduría. Pero la confianza puede ser un don muy difícil de aprender.
La actitud opuesta a confiar en lo inesperado es tratar de CONTROLAR lo incontrolable. Las sociedades chamánicas reconocen que el individuo al que no les gustan las sorpresas ni lo inesperado, tiene apegos. Los apegos son expectativas fijas e inamovibles, deseos proyectados sobre personas, lugares y situaciones. Cuando tenemos apegos solemos volvernos controladores y rígidos.

EL TEMA DEL DESAPEGO
El principal propósito del arquetipo del tramposo (representa al maestro que sorprende a la gente para permitirles ver sus apegos y actitudes habituales) es enseñar a los seres humanos la lección del desapego. La mayoría de los occidentales equiparamos la palabra “desapego” con que algo “no nos importa”. Sin embargo, la palabra DESAPEGO podría definirse como “la capacidad de que algo no nos importe mucho desde un lugar de objetividad”. No aferrarnos a las cosas, poder soltar y mantener el sentido del humor. Allí donde conservamos el sentido del humor es donde estamos desapegados y podemos ser flexibles.

PÉRDIDA Y RITUAL
Otra de las formas que tenemos de aprender a desapegarnos es la PÉRDIDA. (William Bridges – Surviving Corporate Transition)

    1. Perder apegos
    2. Perder terreno
    3. Perder la estructura
    4. Perder un futuro
    5. Perder el significado
    6. Perder el control

Cualquier tipo de pérdida (seres queridos, etc.) es una experiencia que nos hace más humildes y nos enseña algo mas sobre la aceptación y el desapego.

El ritual (momentos de cambio) es un acto consciente por el que se reconoce que está ocurriendo un cambio en la vida, y se hace algo para honrar y apoyar este cambio, contando para ello con la presencia de elementos tales como testigos, regalos, ceremonias y una intención SAGRADA.
Se apoyan los cambios y de crea la forma para “que las cosas vuelvan a encajar”.

LOS ESPÍRITUS DE LOS ANTEPASADOS
Se considera que son importantes maestros dentro del tema del desapego porque ya han afrontado el proceso de transición y han experimentado la quintaescencia de lo desconocido, la muerte

    • Antepasados MASCULINOS: lado DERECHO
    • Antepasados FEMENINOS: lado IZQUIERDO

Si solicitamos la ayuda de los espíritus de nuestros antepasados para que nos ayuden a afrontar situaciones desconocidas, también podemos pedirles ayuda para realizar el sueño de nuestra vida.
Nos pueden ayudar a romper pautas familiares dañinas y retener lo bueno.

HERRAMIENTAS DE PODER DEL MAESTRO
SILENCIO
Silencio atento: las experiencias transpersonales y la guía interna se presentan en momentos de silencio o en extensos períodos de soledad.
Para poder conectar con el recurso humano de la sabiduría es necesario PRACTICAR EL ARTE DE ESCUCHAR.

LLAMAR A LOS ESPÍRITUS DE LOS ANTEPASADOS
El hecho de llamar por sus nombres a los antepasados lo hace manifestarse.
Aquellos que nos han procedido han hecho de nosotros lo que somos.

MEDITACIÓN SENTADA
En el silencio, la persona sentada se convierte en un testigo imparcial que observa SIN JUICIO el proceso que se revela ante él.
Postura receptiva o de aprendizaje.
Nos enseña a esperar, escuchar y observar lo que se nos revela.

LA CONEXIÓN DEL MAESTRO CON LA NATURALEZA
Oeste es el hogar de la Abuela Océano y de todas las criaturas del agua.
Oeste es el lugar donde muchos pueblos invocan el poder del silencio, de la sabiduría y la guía de los antepasados.
Oeste = Otoño: momento de recolección y desprendimiento.
AGUA: LIMPIAR, NUTRIR, SANAR Y PURIFICAR

CÓMO SE REVELA EL MAESTRO NO MANIFESTADO: ASPECTOS SOMBRÍOS DEL ARQUETIPO DEL MAESTRO, EL NIÑO HERIDO DEL OESTE

PAUTAS DE POSICIONAMIENTO, CENSURA Y CONTROL
La sabiduría es la capacidad de integrar las partes más y menos desarrolladas de nosotros mismos desde el punto de vista del testigo imparcial. Cuando somos capaces de valorar nuestra autoestima en la misma medida en que valoramos nuestra autocrítica, comenzamos a entrar en el camino de la sabiduría. Experimentamos el lado sombrío del arquetipo del maestro cuando mostramos comportamientos rígidos de POSICIONAMIENTO, CRÍTICA y CONTROL. El maestro puede asumir estos comportamientos, pero no se abandona a ellos.

El polo opuesto del posicionamiento es la flexibilidad; el polo opuesto de la crítica es la objetividad y el discernimiento; y el polo opuesto del control de la confianza. Los patrones de posicionamiento, crítica y control generalmente están basados en el miedo y siempre revelan una falta de confianza. Si a través de la autoobservación llegamos a la confusión de que estos comportamientos son demasiado frecuentes en nosotros, debemos recordar que también llevamos dentro un gran don de sabiduría que está esperando poder expresarse plenamente. Las personas que tienen naturalezas muy críticas pueden utilizarlas de manera constructiva. Por ejemplo, la gente que sabe escribir puede escribir artículos críticos evaluando lo viable y lo inviable en un proyecto dado.

El mal tiene un doble origen: el MIEDO y la IGNORANCIA. La función del miedo es advertirnos de la existencia de algún peligro para que podamos tomar precauciones. El principal efecto del miedo es que constriñe nuestra energía, lo que puede dañarnos tanto física como mentalmente, y nos motiva a luchar o emprender la huida.

Hacemos daño cuando ignoramos conscientemente a las personas o situaciones. También podemos hacer daño involuntariamente cuando nos encontramos en un estado de “bendita ignorancia”. Por ejemplo, podemos decirle a la persona que acabamos de conocer: “Realmente, no puedo entender a la gente que deja las cosas para después”, sin saber que nuestro nuevo amigo tiene ese hábito y está luchando por superarlo.

CONFUSIÓN
La ignorancia a veces es una fuente de CONFUSIÓN, que junto con la duda son el lado sombrío de la claridad. Cuando estamos confusos, en lugar de actuar debemos esperar. Si las circunstancias nos obligan a actuar, debemos buscar los puntos claros y actuar únicamente en estas áreas.

Discernimiento es la habilidad de respetar el contexto, el momento y el contenido oportunos.
Cuando estamos atrapados en el lado sombrío del discernimiento, actuamos bruscamente, de manera inapropiada e ignorando el contexto.

APEGOS
Los posicionamientos revelan la presencia de APEGOS.
Debemos equilibrar nuestras capacidades, de manera que podamos estar tan apegados como desapegados.

Es importante recordar que la sabiduría es casi siempre flexible y casi nunca rígida. A medida que desarrollamos la flexibilidad, aumenta nuestra capacidad de expresar sabiduría y soltar los apegos.

Ver otras sendas:
La senda del guerrero
La senda del sanador
La senda del vidente
La senda del maestro

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