Mucho se habla, por fin, de como afecta un proceso tan natural como es la regla en las mujeres, pero como en muchas cosas se quedan en la superficie y solo se visualizan y se tienen en cuenta los casos aquellos extremos, el dolor menstrual inhabilitante llamado dismenorrea (¡toma nombre bonito!). Como tal el proceso de menstruación es un cambio hormonal que afecta no únicamente los días D, sino también todos los del ciclo. El mundo en el que vivimos, no está diseñado para tener en cuenta situaciones cíclicas, nos requiere siempre dar el máximo de nosotras mismas. Si eres conciente de como te afecta el ciclo menstrual, es posible que tu vida sea un poco más llevadera y entiendas el porqué de algunas cosas que nos pasan.
El ciclo menstrual se divide en 4 fases y en cada uno de ellas a nuestros cuerpos les pasan cosas que hacen que cambie nuestro cuerpo, nuestro humor y percepción del mundo. No, no estamos locas, es todo puramente química y no en todas las mujeres dura exactamente lo mismo (de 24 a 36 días), ni a todas nos afecta por igual, en mi caso, no me toques mucho los ovarios los días previos al sangrado.
Las cuatro fases del ciclo son:
- La menstruación (equivalente al invierno)
- La fase folicular (equivalente a la primavera)
- La ovulación (equivalente al verano)
- La fase lútea (equivalente al otoño)
La menstruación (invierno interior) (días 1 al 5)
Estos son los días archiconocidos y evidentes del ciclo menstrual. La hormona progesterona cae en picado, haciendo que el revestimiento uterino se deshaga y empecemos a sangrar entre 3 y 7 días. Además de la progesterona también cae el estrógeno, esto hace que la fisiología del cuello uterino cambie permitiendo fluir la sangre. Es normal también notarse más hinchada.
Los niveles bajos de progesterona pueden hacer que tengas dolor en los huesos además de que pueden dar lugar a cambios en el estado de ánimo, causando disminución de la líbido (deseo sexual), ansiedad, nerviosismo en insomnio. Es posible que te sientas cansada, introvertida, sensible tanto a nivel físico como emocional e introspectiva. Como tal son unos días como si estuviésemos hibernando. Es normal que nos encontremos sin energía.
Si sufres de síntomas premenstruales, es posible que al llegar a esta fase notes un gran alivio tras unos días de incomodidad e irritabilidad insoportables.
Tómate estos días de la forma más calmada posible, descansa, hazte duchas y baños de agua caliente, evita comidas que te hagan sentir hinchada. Si haces ejercicio que sea más bien de baja intensidad.
Estos son unos días incómodos para cualquier mujer, ya que tienes que estar pendiente del sangrado, además de que tu cuerpo huele distinto.
La fase folicular (primavera interior) (días 5 al 14)
Esta fase se llama aquí porqué tu glándula pitutaria (que está en el cerebro) secreta una hormona que se llama «hormona estimulante del folículo (FSH). Esta hormona literalmente estimula los folículos (dónde se encuentran tus óvulos inmaduros) de uno de tus ovarios para que maduren.
En los primeros días, los niveles de estrógeno y progesterona siguen bajos. A medida que te vas acercando a la fase de la ovulación estos irán subiendo, notando que cada día tu energía y estado de ánimo sube un poco mas. Es como un lento y perezoso despertar. Los días se irán convirtiendo en días mas claros y llevaderos, tu humor mejorará y estarás cada día mas abierta.
Es el momento del mes que nos sentimos mas centradas y seguras de nosotras mismas. Es un buen momento para empezar proyectos nuevos, avanzar con los corrientes y tomar decisiones importantes.
La ovulación (verano interior) (días 14 al 16)
Esta fase es la más relevante del ciclo menstrual (incluso más que la de la regla). Dura únicamente dos o tres días y una vez termina la ovulación hay un pico muy alto de LH (hormona luteinizante) que causa que el folículo dominante literalmente se reviente y catapulte el óvulo a la trompa de Falopio para que pueda ser fecundando. La progesterona es una hormona sexual femenina del grupo de los esteroides, producida y liberada por los ovarios después de la ovulación.
El óvulo solamente vive entre 12 y 24 horas y hay solo dos opciones: o es fertilizado o se muere. En algunos casos es posible que maduren dos óvulos en el mismo ciclo y es por esto que existen los gemelos fraternos. Pero ojo, esto pasa en un plazo máximo de 24 horas. La ovulación únicamente se da una vez en el ciclo, nunca jamás podremos ovular dos veces en un solo ciclo.
Durante la fase ovulatoria tu libido está en su nivel más alto, pues el estrógeno y la progesterona se incrementan a su nivel máximo. A nivel emocional estamos radiantes, con energía desbordante. El sentimiento de bienestar puede ser increíble y nuestra autoestima se dispara por los aires. Te sientes mucho más segura de ti misma y es el momento perfecto para ir a una entrevista de trabajo, cerrar un contrato, conseguir un nuevo cliente y tener conversaciones importantes.
Durante estos días aprovecha para conectar a un nivel más profundo con las personas importantes de tu vida, ten conversaciones profundas, conoce personas nuevas y explora tu creatividad.
La fase lútea (otoño interior) (días 16 al 28)
Esta fase se divide en dos y típicamente dura entre 9 y 18 días.
Después de ovular los niveles de FSH y LH caen abruptamente y se quedan bajos por el resto del ciclo. El estrógeno y la progesterona gradualmente bajan y el folículo que liberó el óvulo se convierte en el cuerpo lúteo que empieza a producir progesterona, la hormona dominante en esta fase. Esta hormona produce calor y también estimula el crecimiento del endometrio en preparación para un posible embarazo.
Durante la segunda parte de la fase lútea, el estrógeno volverá a subir un poco en preparación para un embarazo. Si no quedas embarazada, los niveles de estrógeno y progesterona bajan, causando que el endometrio se libere y empiece el ciclo otra vez con la llegada de la menstruación.
La segunda parte de la fase lútea es quizá la más difícil para muchas mujeres. Puede que empieces a sentir síntomas premenstruales fuertes, muchos antojos, cambios de ánimo, irritabilidad y pesadez.
Lo más importante en esta fase es no ser tan dura contigo misma. Puede que te sientas muy sola o como si estuvieras loca y todos estos síntomas estuvieran en tu cabeza. No es así, hay una cantidad de cambios hormonales llevándose a cabo en tu cuerpo y es normal sentirte diferente a como te sentías en otros momentos del ciclo. Tampoco es normal (pero si es común) tener síntomas premenstruales que interrumpen tu vida y hay muchas cosas que puedes hacer para mejorarlos, normalizar el sufrimiento y el dolor femenino no está bien.
A medida que se acerca el final del ciclo y empiezas la transición hacia el invierno interior, es hora de empezar a descansar y conservar tu energía.
Llegamos al final del ciclo y, asumiendo que fue un ciclo con ovulación, una de dos cosas va a pasar: empiezas un nuevo ciclo con una nueva regla o, si quedaste embarazada, tu cuerpo se empieza a preparar para crecer esa nueva vida.
Como puedes ver, durante nuestro ciclo un montón de cambios están pasando constantemente.
Estos cambios hormonales tienen un gran efecto en nuestra vida diaria y determinan nuestro nivel de energía, nuestro estado de ánimo, nuestro apetito, nuestro nivel de atención y un largo etc.
Obviamente, todas somos distintas y hay muchos factores que nos afectan de forma personal a cada una. Pero la realidad es que todas somos cíclicas, y conocer y respetar nuestra naturaleza cíclica nos puede ayudar a literalmente cambiar nuestra vida.
Sabiendo esto, podemos aprovecharlo para organizar un poco mejor nuestro día a día teniendo en cuenta los cambios anímicos y energéticos. Sobre todo debemos evitar luchar contra lo que nos pasa, contra lo que sentimos y antes de todo preguntarnos si lo que nos está ocurriendo es consecuencia del estado químico de nuestro cuerpo.
Te recomiendo que en tu próximo ciclo, pongas un poco más de atención a los cambios que percibes en tu cuerpo y te des cuenta de como va cambiando, como te encuentras y de lo relatado con qué cosas te sientes más o menos identificada.
Tal como he mencionado al principio, para mí, los días previos a la regla, son los más críticos y que por casualidades de la vida, resultan ser los días en los que me convierto en un imán para los conflictos y me convierto en una bola demoledora humana.
¿Cómo te afecta a ti, aunque no seas mujer, el ciclo menstrual?
Referencias
– Todo lo que necesitas saber sobre las cuatro fases de tu ciclo menstrual
– ¿Por qué estamos de mala leche cuando estamos premenstruando?
– Síndrome premenstrual, ¿o un mundo no preparado para tener la regla?